Hospitales de Argentina comenzaron a reemplazar los termómetros con mercurio, que genera daños en el medio ambiente y afecta la salud, informó este jueves la oficina local de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
"Argentina avanza hacia la eliminación del uso del mercurio en el sistema de salud. Varios hospitales iniciaron el proceso de reemplazo progresivo de los termómetros con mercurio por los digitales", dijo la oficina en un comunicado.
El Gobierno argentino también propicia la prohibición de tensiómetros con este elemento químico y realiza diversas gestiones para que el mismo se deje de utilizar en la odontología.
Argentina puso en marcha un proyecto con la OMS y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) para profundizar esta estrategia, se indicó en la nota.
"La estrategia también apunta al trabajo con las universidades y las asociaciones de odontólogos para que los futuros y actuales profesionales de esta rama sustituyan el uso del mercurio en las amalgamas", sostuvo la entidad.
Según datos del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma), los odontólogos usaron en 2005 en el mundo entre 240 y 300 toneladas de mercurio para amalgamas.
El mercurio es un elemento químico que suscita preocupación a nivel mundial debido a su capacidad para recorrer largas distancias a través de la atmósfera, su persistencia en el medio ambiente, su capacidad para acumularse en los ecosistemas y sus importantes efectos negativos sobre la salud humana y el medio ambiente.
A raíz de la preocupación que ocasiona, más de 140 países aprobaron días atrás un convenio que busca reducir los efectos nocivos del mercurio.
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