El orden de cada entrada dependerá de
diferentes configuraciones pero más o menos todas las webs viene a decir lo
mismo, que es beneficioso.
No lo voy a poner en duda, caminar es básico, pese a que podamos acceder
a mucha información sin levantarnos de la silla del ordenador, hasta para
llegar a ella necesitamos caminar, no hay vuelta atrás, ni siquiera el
teletransportador de Star Trek se libra, paradójicamente iban caminando hasta
él . Antes se caminaba para ir al trabajo,
ir a por agua, a por alimentos, hoy la vida mucho más sedentaria del mundo
occidental ( y occidentalizado) hace que el esfuerzo físico haya pasado de ser
una obligatoriedad a ser una forma más
de ocio y parte de tratamientos (sobre todo contra el sobrepeso).
Básicamente
caminando quemamos calorías, fortalecemos algunos músculos, mejoramos el ritmo
cardíaco y produce en general un mejor estado de ánimo en el practicante
siempre y cuando la experiencia sea positiva.
Ahora bien ¿qué ocurre si tenemos
SII? Sin duda vuestro médico os habrá dicho que hay que caminar y/o hacer algún
deporte que os ayudará con el alivio de ciertos síntomas, pero entramos en esa
dinámica de círculo vicioso que en ocasiones nos produce el SII, con ciertos
síntomas, sobre todo diarrea, no hay quien se mueva de casa ( del WC) salvo
obligación imperante , así que a veces para ir a trabajar, exámenes o
cuestiones ineludibles toca usar un antidiarréico, más hidratarse y por lo
general dejamos de tomar alimentos sólidos y esas no son en absoluto las
condiciones mínimas adecuadas para salir a caminar. Sí, dicen que caminar no
desgasta, no cansa y no lesiona, pero no es cierto, cansa, desgasta porque en
ayunas tenemos menos energía y sobre todo menos líquido si padecemos de diarrea
y así sí que os podemos lesionar más la incomodidad que supone caminar ya solo
con síntomas leves como dolor y meteorismo.
Así pues si nos notamos enfermos no salimos a caminar y menos a un
gimnasio a correr a una cinta mecánica de modo que si queremos incluir un ejercicio
tan básico en nuestro tipo de vida necesitamos ciertas condiciones.
Primero, iniciarse a la caminata cuando
nuestro SII está activo es poco menos que imposible ( sí, hay grados, pero una
crisis de SII no deja lugar a dudas) si bien ligeros paseos en torno a la
vivienda, subir y bajar escaleras o en el mismo pasillo nos pueden ayudar a no
quedarnos pegados a al cama, sofá o taza del sanitario. Es importante estar
bien hidratado, pero claro, no todos tenemos la misma necesidad de agua, e
incluso si hemos tenido diarrea necesitaremos agua más algo para reponer sales,
así que ojo con intentar esfuerzos cuando el cuerpo no está para ello. La edad
y el estado físico son determinantes para decidir como y cuando empezar, el
consejo de un entrenador deportivo puede ser válido, pero si un médico os hace
una analítica y so dice vuestro estado mejor que mejor eso orientará al preparador para ofreceros un
plan de "trabajo" adecuado, sí, hay aplicaciones gratuitas para
smartphone que ayudan, yo uso una, pero primero consulté mi estado de salud
general .
Así pues lo
primero estado de salud. Segundo el recorrido, el donde. Bueno, un circuito de
entre 3 a 5 kilómetros para empezar suele ser lo recomendable si es en
exterior, si es en una cinta de gimnasio será el preparador el que os aconseje
, pero bajo mi punto de vista personal, nada como el aire libre ( sí, incluso
con lluvia). El eterno temor de quienes padecemos SII de sentir la urgencia
defecatoria es para mí, el mayor lastre, así que toca enfrentarse con las armas
que disponemos. Primero debemos de ser conscientes de que si tenemos dolor o
una crisis leve nos encontraremos incómodos
y posiblemente el paseo o entrenamiento nos suponga un extra de
ansiedad, con lo cual no nos ha servido de nada, así que podemos optar por
recorridos breves cercanos al domicilio o "zonas de confianza" es
decir lugares con aseos públicos accesibles o una distancia a nuestro domicilio
que nos permita llegar. Esa confianza
nos ayudará a concentrarnos en el acto en sí de caminar y disfrutarlo, porque
si en las primeras incursiones lo pasamos mal está claro que ,como en cualquier
otra actividad, lo acabaremos dejando.
Así pues iniciarse en recorrido pequeños y en "zonas de
confianza" nos proporcionará niveles de satisfacción personal que irán
aumentando.
¿Podemos
aumentar el recorrido, "exponernos" más y progresar? Sí, poder se
puede, pero ojo, cualquier actividad tiene días buenos y malos, no es lo mismo
que un corredor tenga una molestia muscular a que un corredor o caminante con
SII tenga un dolor agudo, una crisis o una urgencia defecatoria, así pues la
progresión pasa por los mismo niveles, "zona de confianza" y estado
de salud, la misma ansiedad por mejorar sea comos ea puede ser contraproducente
, y también hay que tener en cuenta que cuando se empieza a hacer un deporte lo
ideal es también modificar algunos malos hábitos alimenticios, así que quizá
nos encontremos con cambios y sensaciones que nos pueden desconcertar, o
desanimar.
Extrapolar
esto a un colectivo es imposible, nadie tiene una receta mágica común,si bien
la práctica de algo tan natural , tan básico
y tan barato, salvo que te
quieras vestir de "profesional", como es el caminar nos puede
reportar muchos beneficios si reparamos en las premisas que creo son básicas.
No soy muy amigo de
hacer de lo
personal campaña, pero he pasado de la
agorafobia casi absoluta a caminar por zona boscosa (en una "zona de
seguridad") una hora cada tres días a buen ritmo, incluyendo un plan
dietético (debo de ser el único con SII y obesidad según mi médico), pero no he
pasado de un día para otro y sé
perfectamente que si vuelve la agorafobia no podre continuar, así que mientras
tanto,camino,aprendo de mí mismo y analizo mis cambios y sensaciones.
Comentarios
Publicar un comentario